Bautista Mascia, el carismático ganador de la última edición de Gran Hermano, revivió un momento de intensa emoción y balance al cumplirse dos años exactos desde que cruzó la icónica puerta de la casa más famosa de la televisión argentina.

Con el paso del tiempo, el uruguayo no solo se consolidó como uno de los participantes más queridos de la temporada, sino también en un ejemplo de cómo una decisión impulsada por el deseo de cambio puede desatar una verdadera transformación personal y pública.

A través de una serie de historias en sus redes sociales, Bautista compartió con sus seguidores un repaso lleno de gratitud y sinceridad sobre su ingreso y el profundo significado que la experiencia Gran Hermano adquirió con el correr de los meses.

🚪 El Salto al Vacío: "Solo Quería Salir de la Zona de Confort"

En su primer posteo, Mascia rememoró la incertidumbre inicial y la búsqueda personal que lo impulsó a dar el gran paso hacia el reality:

"Hoy hace dos años entraba a Gran Hermano sin saber en qué me metía. Solo quería salir de la zona de confort, vivir una experiencia distinta y ver qué pasaba. Lo que jamás me hubiese imaginado era todo lo que iba a pasar afuera, que ese día iba a ser el arranque de algo tan increíble."

Desde ese punto de partida, el recorrido de Bautista estuvo marcado por el aprendizaje, la resiliencia y la magia de saberse parte de un fenómeno mucho más grande que un simple juego televisivo.

✨ La Misteriosa "Energía" Detrás de los Muros

La segunda reflexión de Mascia estuvo dedicada a la extraña y potente conexión que sintió, incluso en el estricto aislamiento del juego. El ex hermanito describió una sensación de acompañamiento que trascendía las paredes:

"Es raro por qué incluso ahí adentro, rodeado de tan poca gente y sin señales del exterior, de algún modo sentía una compañía… una energía del otro lado de las paredes que estaba conmigo, como que algo estaba pasando aún sin poder verlo. Que recién 7 meses después de entrar, pude encontrarlo al salir."

De este modo, Bautista puso en palabras la manera en que el afecto y el acompañamiento del público pueden atravesar distancias, pantallas y muros, señalando una de las claves para entender el fenómeno Gran Hermano: el lazo inesperado que se crea entre los participantes y la audiencia.

🙏 El Profundo Agradecimiento: "Gracias por Dejarme Entrar"

La tercera y última historia del uruguayo estuvo teñida por un profundo agradecimiento, reconociendo el papel fundamental de sus seguidores en su transformación:

"Hoy quiero agradecerles. Gracias por estar, por acompañarme y por todo lo que hicieron por mí. Qué lindo animarse a algo tan random sin saber cómo va a terminar… y ver que pasó así de bien. Qué linda casa esa y qué lindo todo lo que vivimos juntos, a distancia. Gracias por dejarme entrar en sus vidas y de entrar a la mía."

Con estas palabras, Mascia cerró su emotivo balance, expresando su gratitud y sorpresa ante la real dimensión del juego: cómo una aventura televisiva se transformó, en su caso, en una oportunidad de crecimiento, redescubrimiento personal y un rotundo éxito.